El seleccionador español Luis de la Fuente quiso contar desde el inicio con su núcleo duro. A pesar de que no le tiembla el pulso a la hora de apostar por la juventud, el entrenador riojano no quiere sorpresas y necesita a sus veteranos en el equipo. Y más tras la baja de Fabián, que por culpa de unos inoportunos problemas físicos tuvo que abandonar la concentración y se perderá su primera convocatoria con la Roja desde que De la Fuente tomó las riendas del equipo nacional después del Mundial de Qatar.
Para ello, el seleccionador español no dudó en llevarse a Rodrigo Hernández, Dani Carvajal y mantuvo a Álvaro Morata, tres grandes líderes de este equipo. Junto a ellos, también tienen ascendencia en el vestuario otros futbolistas con más trayectoria como Unai Simón, Olmo, Fabián, Oyarzabal o Ferran Torres, todos ellos soldados del míster, a quien conoce bien desde las inferiores.
El caso de Rodri y Carvajal causó sorpresa porque seguramente no se les esperaba tan pronto. De hecho, Carvajal confirmó públicamente que ni él mismo se contaba entrar ya en esta primera fecha FIFA de la temporada. Están aún cogiendo ritmo de competición con sus respectivos equipos tras superar lesiones de larga duración, pero empieza nuevo ciclo y De la Fuente los quiere junto a él desde el inicio para marcar el camino al vestuario de cara al gran objetivo del curso: el Mundial.
Sofía será el primer examen de un grupo en el que España, además de enfrentarse a Bulgaria, también tendrá como rivales a Turquía –el compromiso del próximo domingo– y a Georgia. El formato no da margen al error: únicamente el primero de cada liguilla obtendrá el billete directo para el sorteo mundialista en Washington el 5 de diciembre.
En cualquier caso, la Roja juega con una red de seguridad. Gracias al título de la Nations League, España tiene garantizado al menos un puesto en el playoff, privilegio que comparte con Portugal, Francia y Alemania. Pero la ambición del vestuario no pasa por la repesca, sino por asegurar el pase con autoridad, como ha venido haciendo en los últimos campeonatos.

Los jugadores de la selección muestran lo finos que están de cara a portería por estos golpeos desde fuera del área
Para De la Fuente, además, también será un reto: debutar en la fase de clasificación a un Mundial como seleccionador absoluto. Tras conquistar la Nations League y la Eurocopa, ahora le toca demostrar que la solidez mostrada en Europa puede trasladarse a un escenario global. Con una generación acostumbrada a ganar y unida que lleva tiempo mirando de reojo a Estados Unidos, México y Canadá. Llegó el momento de enfrentarse al desafío unidos. Ya se puede hablar del Mundial.